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Realizar entrenamientos sacados de internet: Debes seguir un plan de entrenamiento de acorde a tu objetivo, tu nivel físico (novato, intermedio, avanzado), tus implementos, tú horario disponible, etc. Lo mejor es buscar a un profesional online que te ayude en el proceso, así evitarás perder el tiempo.
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Cambiar de rutina constantemente: Esto es un grave error, pensamos que haciendo diferentes ejercicios cada semana hará que crezcan más nuestros músculos, cuando lo mejor es ir avanzando en un mismo ejercicio, tanto en mejorar la técnica, en series y repeticiones.
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No prestar atención a las posturas: Esto puede traer grandes consecuencias como la poca estimulación de los músculos que se desean trabajar y en el peor de los casos, lesiones.
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No hacer un calentamiento previo: Comenzar los ejercicios sin antes preparar tu cuerpo para ello, puede traerte poca activación de los músculos a trabajar e incluso lesiones. Lo mejor es que entres en calor y prepares tus músculos y articulaciones para lo que se viene.
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Olvidarte de la alimentación: El error que la gran mayoría comete, se piensan que hacer mucho ejercicio y seguir comiendo mal les dará resultados, pero no es así. Ambos están conectados, y es la alimentación la que hará la diferencia, principalmente a la hora de conseguir tu objetivo (pérdida de peso o aumento de masa muscular).